MODELADO DE SOLIDO


 El modelado de sólidos es una rama del modelado geométrico que hace énfasis en la aplicabilidad general de modelos, e insiste únicamente en la creación de representaciones “completas” de objetos físicos sólidos, esto es, representaciones que son adecuadas para la respuesta de preguntas geométricas arbitrarias de manera algorítmica.

El objetivo de la aplicabilidad general, separa al modelado de sólidos de otros tipos de modelado geométrico, los cuales están enfocados hacia propósitos especiales. Los modelos gráficos (Graphical Models) intentan describir un dibujo de un objeto mas que el objeto en si mismo.
 
 
 
Los modelos de forma (Shape Models) representan una imagen de un objeto. Estos modelos pueden ser colecciones no estructuradas de elementos de imagen, o pueden tener alguna estructura interna para proporcionar operaciones de procesamiento de la imagen. Los modelos de superficie (Surface Models) proporcionan información detallada de una superficie curva, pero no siempre dan suficiente información para determinar todas las propiedades geométricas de un objeto limitado por la superficie.

El modelado de sólidos es el conjunto de teorías, técnicas y sistemas orientados a la representación “completa en cuanto a información” de sólidos. Dicha representación debe permitir (al menos en principio) calcular automáticamente cualquier propiedad bien conocida de cualquier solido almacenado [Requi83].

Con los sólidos representados necesitaremos, además de visualizarlos y editarlos, calcular sus propiedades físicas (por ejemplo su peso o su centro de gravedad), y simular sobre ellos procesos físicos (como la transmisión de calor en su interior).

Antes de plantearnos como realizar la representación, es necesario concretar cuales son los objetos a representar. Es decir, formalizar lo que entenderemos por solido [Mantyla 88]. Hay dos aproximaciones diferentes al problema, una que caracteriza al solido como un conjunto de puntos 3D, conocida como modelo topológico o de conjunto de puntos, y otra que caracteriza matemáticamente al solido a partir de la superficie que lo delimita, esto es, su piel o frontera. De este modo estableceremos un sistema de representación con tres niveles: sólidos físicos, modelos matemáticos de sólidos y representaciones [Mant88, pp.32].